Las mujeres deben estar al frente y al centro de la recuperación de la pandemia, no como una cuestión de caridad, ni siquiera como una cuestión de justicia y derechos humanos básicos, aunque esto es cierto, sino como una cuestión de economía; de eficiencia y eficacia; de resiliencia social y comunitaria.
El Informe del Secretario General de la CSW 65 ofrece un análisis exhaustivo de las circunstancias actuales a las que se enfrentan las mujeres en todo el mundo. Aunque hemos avanzado, lamentablemente la igualdad de género sigue siendo un sueño. El informe incluye las recomendaciones que se describen a continuación.
Primero, el fortalecimiento de los marcos normativos, legales y regulatorios con respecto a la igualdad de género. Las siguientes medidas lo permitirán: reforma integral de las leyes, políticas y reglamentos que discriminan a la mujer; paridad de género en puestos ejecutivos en gobiernos locales y nacionales; Objetivos de cuota 50% para representaciones parlamentarias, entre otros.
En segundo lugar, la prevención y eliminación de la violencia contra la mujer en la vida pública. Las medidas sugeridas son: marcos legales; capacidad para hacer cumplir la ley; Configuración estándar; y prestación de servicios, entre otros.
En tercer lugar, fortalecer las reformas institucionales sensibles al género. Se sugieren las siguientes medidas: metas de paridad de género para los grupos de trabajo; comités permanentes y otros órganos de toma de decisiones, particularmente en respuesta al COVID-19; y tolerancia cero a la violencia establecida en códigos de conducta.
En cuarto lugar, aumentar la disponibilidad de financiamiento de alta calidad en apoyo de la participación de las mujeres en la vida pública. Las medidas sugeridas son: apoyo público y privado a las candidatas; aumentar el porcentaje de los fondos de asistencia oficial para el desarrollo que se destinan a objetivos independientes de igualdad de género y organizaciones de mujeres; y aumentar la calidad y la cantidad de fondos para apoyar a las mujeres en la vida pública.
Finalmente, fortalecer la voz de las mujeres y no dejar a nadie atrás en la vida pública. Las medidas sugeridas son: creación de capacidad, formación y sensibilización para facilitar la entrada de las mujeres en la política; apoyo específico a las mujeres que enfrentan formas de discriminación múltiples e interrelacionadas para que participen en la vida pública; fortalecer un entorno propicio para la participación de la mujer en la vida pública; y financiar y apoyar la representación positiva de las mujeres en la vida pública en los medios de comunicación.
Leer un Resumen del informe por Paula Montano CJ y Mary Elizabeth Kirke IBVM (español).
Leer el informe completo aquí.
Autor: Charlotte Jones
Foto principal: Secretario General de la ONU, Antonio Guterres, sitio web de fotografías de la ONU
